Las vecinas de Puerta del Ángel nos plantamos frente a Madlyn, el fondo buitre que posee alrededor de 30 edificios en el barrio.
Desde el año 2018, Madlyn ha invertido 45 millones de euros en torno a unos 30 bloques de vivienda en Puerta del Ángel y actualmente están consolidando su proyecto a través de los comercios y la apertura de un hotel.
Las vecinas hemos dado un paso al frente y el sábado 13 de abril realizaremos un paseo reivindicativo por el barrio, señalando algunos de los principales bloques de este fondo buitre.
Las inquilinas de Puerta del Ángel hemos dado un paso al frente y nos disponemos a señalar a quien está destrozando el barrio. Para ello, hemos convocado un paseo reivindicativo este sábado 13 de abril a las 12:00 en la Plaza de Santa Cristina, donde se informará al resto de vecinas sobre esta situación que está provocando que cada vez más personas nos veamos desplazadas.
Madlyn es el nombre de la inmobiliaria con la que el fondo buitre BWRE ha aterrizado en los últimos años en Puerta del Ángel. Este fondo buitre, fundado en el año 2012 por dos exdirectores de Aguirre Newman -consultora fundada por un hermano de Esperanza Aguirre- y con capital extranjero, cuenta con ciento de millones de euros invertidos en distintos activos inmobiliarios de la Comunidad de Madrid.
Entre 2012 y 2016, este fondo buitre fue uno de los protagonistas de la gentrificación del centro de Madrid, invirtiendo en más de 400 apartamentos en Malasaña, Chueca y Lavapiés. Tras expulsarnos a cientos de vecinas de sus pisos en estos barrios, ahora ha encontrado en el otro lado del río una zona en la que especular a gran escala.
Por ello, desde el año 2018, Madlyn se ha hecho con decenas de bloques de viviendas en Puerta del Ángel para repetir lo que ya hicieron en el centro. Desde entonces, llevan años subiendo el precio de los alquileres en esta zona de manera abusiva, presionando a los mayores con rentas antiguas y echando del barrio a todas las que llevaban años viviendo en estos edificios para cambiarlos por turistas y rentas más altas. En base a conversaciones con las vecinas de estos edificios, se ha podido conocer cómo se han dado subidas en pisos que han pasado, por ejemplo, de 600 a 1300 euros en menos de dos años. Es decir, estableciendo unos precios prohibitivos que la gran parte de la población no se puede permitir.
Ahora mismo, han decidido centrarse en continuar con el proceso de gentrificación a través de los comercios, atrayendo a dueños de negocios del centro de Madrid para que repliquen este tipo de locales en las calles de este barrio. Esto no solo continúa gentrificando la zona y fomentando la subida de los precios, sino que supone una amenaza para el tejido comercial tradicional.
Otro ejemplo de la consolidación de este proyecto se encuentra en el hotel Madrid Live Coworking, que ha sido abierto en las últimas semanas y entronca con la nueva idea que quieren transmitir sobre este territorio.
Además, ya han avisado que pretenden volver a repetir este proceso en otros barrios al sur de la M-30, como Carabanchel o Villaverde. Ante unas instituciones que permiten especular y hacer negocio con nuestras vidas, las inquilinas nos hemos organizado para frenar esto.
Ante unas instituciones públicas que permiten la inversión de grandes fondos para hacer negocios sobre la vida de las personas, la organización inquilina se presenta como un punto de inflexión para combatir la especulación inmobiliaria. Pese a que el negocio parecía a priori exitoso para Madlyn, no contaban con encontrarse ante un barrio organizado que está cansado de estas dinámicas.
No es la primera vez que el Sindicato de Inquilinas nos plantamos ante fondos que poseen cada vez más propiedades en Madrid, como Néstar, Elix o Blackstone, y cada día son más los casos de éxito frente a estos grandes tenedores. Por ello, Madlyn no lo va a tener fácil en Puerta del Ángel.